Como patólogo del habla y el lenguaje, la regla general es que se espera que una palabra sea una a la edad de 1 año. Algunos niños tienen muchas palabras mientras que otros, como los que aprenden dos idiomas, pueden tardar semanas o meses más.
Su hijo no se retrasa en el habla.
El desarrollo del habla comienza con un niño que arrulla y balbucea y pasa a la jerga. Estos hitos son los requisitos previos para las palabras que siguen. Estas etapas son ricas en el aprendizaje de cómo producir una variedad de sonidos.
La etapa de arrullo se centra en el aprendizaje de cómo producir el sonido a voluntad. Los primeros arrullos o chillidos ocurren accidentalmente hasta que se logra un control intencional. Las vocales son generalmente los sonidos que se escuchan en esta etapa y se hacen con sutiles cambios en el movimiento de la lengua y la apertura de la boca.
El balbuceo introduce sonidos similares a las consonantes. Estos sonidos también ocurren primero por accidente cuando el niño cierra los labios en los juguetes de la boca o levanta la lengua para chupar repetidamente. (Por cierto, “mamá” se produce al dominar el cierre de los labios con el sonido y “papá” al levantar la lengua).
Como padre, puede apoyar el desarrollo de su hijo en cada etapa haciéndole eco de los sonidos de su hijo. Esto se denomina a veces “habla de bebé” o “habla de madre” y las investigaciones indican que este comportamiento de los padres apoya el desarrollo del habla del niño. La clave es modelar los sonidos de su hijo y luego expandirlos un poco para estar sólo un pequeño paso por delante de ellos.
Al imitar los sonidos de un niño, lo anima a repetir el sonido de nuevo. Este es el primer paso para aprender a imitar. Después de que aprendan este juego, puedes hacer cambios simples y animarlos a que te copien. Continúe el proceso hasta que intenten imitar sonidos y palabras más difíciles.
Explore los sonidos haciendo el “sonido indio” mientras da golpecitos en la boca o rebota o da golpecitos en los labios con un juguete mientras vocaliza (o incluso mientras llora). Puede estimular los sonidos /b/ y /m/ levantando la barbilla para cerrar la boca mientras vocaliza (o incluso mientras llora).
Hacer varios sonidos en el juego de espejos ayuda a los niños a ver lo que hace su boca.
La clave más importante es divertirse. Disfruta de esta deliciosa etapa de desarrollo. Tiene varios meses para que su pequeño continúe refinando el desarrollo de los sonidos antes de que se esperen palabras sueltas.
Si no se escuchan consonantes en los próximos meses, una evaluación por parte de un logopeda le dará información más específica sobre el desarrollo de su hijo.